El Honda CR-Z es un vehículo vanguardista, el primero en combinar una mecánica híbrida junto con diseño y prestaciones deportivas en el tamaño de un compacto.

Su diseño interior transmite una sensación futurista, casi espacial con mandos muy ergonómicos. El problema es que el panel de instrumentación es mayormente analógico y se ha quedado anticuado. Por este motivo se crea un nuevo cockpit digital basado en su estilo de diseño. Este nuevo panel no solo es más atractivo sino que esta diseñado mediante diferentes niveles de información, de ese modo, por ejemplo, el nivel de combustible o el velocímetro siempre estan visibles para el conductor. Las otras informaciónes entran y se ocultan de forma diagonal sin entorpecer la visión.


*Realizado dentro del Grado en Diseño Integral y Gestión de la Imagen.
 

2017